Accediendo a una invitación realizada en la misa aniversario del año pasado la Presidenta Honoraria de Magallanes, Senadora Sra. Soledad Alvear, hija del histórico presidente del club don Ernesto Alvear, pudo conocer las instalaciones del Complejo Club Deportivo Magallanes guiada por el Director Técnico Osvaldo Hurtado y el Presidente de la Corporación Rafael Castro Meza.
Ahí pudo departir con el personal técnico y administrativo y conoció la ampliación que están viviendo las instalaciones, con el nuevo gimnasio y la cancha de pasto sintético.
La Senadora, realizó un llamado a los Magallánicos a dotar de espíritu y alma el lugar donde se preparan nuestros jugadores, y se comprometió a apoyar la instalación del museo histórico del club. También entregó un saludo de aliento a través del director técnico al plantel que este fin de semana enfrentará a Everton en Viña del Mar.
La Bandita de Magallanes como en tantas tardes de fútbol llegaba al Estadio Municipal de La Pintana para alentar a “La Academia” contra Santiago Morning, pero en la entrada carabineros y personal de guardias (que reciben ordenes de la ANFP) impidieron su paso. La idea en primer momento era requisarles los instrumentos pero el descriterio no llegó a tanto, ya que se dieron cuenta que estos verdaderos hinchas del fútbol eran respetables señores de edad y no barras bravas. El dolor era inmenso y se nos partía el corazón verlos tomar sus instrumentos y regresar por la misma calle que venían. Ellos solo deseaban alentar al viejo y querido Magallanes, pero nada se pudo hacer, ni los reclamos de los hinchas que presenciamos la triste escena alcanzó para conmover a los porteros ni la policía que en ese momento los igualaba a la categoría de barras bravas amparados en la nueva disposiciones de la ley de violencias en los estadios y las ordenes de tolerancia cero impuestas por la ANFP. Simplemente un descriterio de marca mayor.
Ese mismo domingo a través de Twitter y Facebook miles de personas supieron la noticia y los hinchas de todos los clubes salieron en defensa de nuestro amado grupo de músicos en la redes sociales. Los medios deportivos debido a esto comenzaron a dar cuenta de los alcances de la ley que arrasaba con una institución señera, pacífica y un ejemplo del fútbol en familia, características que suele tener la gente albiceleste cada semana. Tanto así que la mismísima presidenta honoraria de Magallanes, la senadora Soledad Alvear junto al Presidente de la Corporación del Club Deportivo Magallanes, Rafael Castro, llamaban a una manifestación y conferencia de prensa a los medios en pleno centro de Santiago (Bulnes con Tarapacá). Todos los canales de televisión abierta y de cable, radios y medios de prensa escrito y virtuales se apretujaban para apreciar a los músicos que al compás del manojito de claveles defendían su derecho de continuar con una tradición de más de 60 años. Habló de manera emocionante la senadora, luego Rafael Castro y, finalmente, los periodistas corrían a tomar la declaración de los músicos, de los jóvenes de la Guardia Albiceleste y los demás hinchas. Los cuales en una protesta alegre y familiar daban una muestra de cómo se vive el fútbol al interior del club, esa de ir en familia al estadio y apoyar al equipo de sus amores solo por el verdadero amor a la camiseta sin violencia. La senadora fue tajante “la bandita es un ejemplo de cómo se debe alentar en el estadio, no se pueden terminar comos así una tradición de años y que alegra y dignifica al hincha del fútbol”.
Tanto revuelo se provocó que hasta la misma intendenta metropolitana Cecilia Pérez, entendía tempranamente los alcance de este reprochable procedimiento y salió a corregir el error de comparar a la gente de Magallanes con las barras bravas y evitar así que la bandita siguiera con este vejamen, declarando “La bandita de Magallanes es una excepción y no es una estructura que constituya violencia ni es comparable para ser aplicable en esta ley”. Sin duda, se confirmaba con esto que lo sucedido el domingo había sido un descriterio y que esto no era comparable a los delincuentes que se disfrazan de hinchas en las barras bravas. Todo lo anterior tras intervención de la senadora y la inmensa presión de las redes sociales que indignadas defendían a nuestros viejos músicos. Los cuales se habían transformado en los protagonistas y haciendo el gol más bello del partido sacando y recibiendo los aplausos de la tribuna de todas las hinchadas del fútbol nacional. Bien por la hinchada que asistió, bien por la bandita de Magallanes y por la Corporación que se hizo parte de la protesta. Sin duda, tenemos el deber de ahora en adelante de cuidar y reconocer a estos músicos más que nunca, ellos nos dan identidad, da gusto sentarnos cerca y escucharlos en la galería. Este fin de semana saquémonos una foto con ellos, abrasémosles y contémosles a nuestros hijos quienes son. Definitivamente no fue lo mismo ganar 4-1 sin la bandita, pero en fin, el mal rato pasó y esperemos que este fin de semana contra Coquimbo Unido, y por todos los años que exista el viejo y querido Magallanes, la Bandita suene con más fuerza que nunca, “viva Magallanes y el fútbol en familia”.
